Cualquier lucha que base su estrategia en la violencia, para mí no tiene el más mínimo respeto. De todas formas, hoy estoy con todos los ciudadan@s vasc@s que a partir de ahora respirarán un poco más de libertad, espero.
Pero sin duda hoy, mis pensamientos y sentimientos están con todas las víctimas del tiro cobarde en la nuca y con las víctimas de las traicioneras bombas ensangrentadas de inocencia.
A partir de ahora, veremos a ver qué es lo que cambia...bienvenida la libertad para tod@s y que continúe el respeto hacia su identidad, destacando a su vez, que ese mismo respeto le deben ellos a todos aquellos que han nacido como vascos y que viven, trabajan y se sienten vascos pero también cerca de España.
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